¿Hay imágenes de niños decapitados? Sí, hay. ¿Hay imágenes de mujeres ultrajadas y paseadas como trofeo en camiones? Sí, hay. ¿Hay imágenes de personas calcinadas? También hay.

Uno de los mayores problemas que pude notar en estos días con tanto contenido sensible circulando es la enorme preocupación de padres sobre la exposición que tienen sus hijos a este material. Yo tengo un hijo de 9 años y tuve que suspender el uso del celular por 1 semana al menos. La verdad es que no usa demasiado el teléfono, pero de todas formas el contenido está tan disperso, por tantos canales y de manera tan cruda que tuvimos que limitarlo de alguna manera. No obstante, no todos los padres pudieron hacerlo, porque cada uno cría a sus hijos como quiere y puede. Ni hablar de padres con hijos adolescentes, donde sacarles el teléfono no es para nada una opción.

Sin embargo, hay muchas opciones para lograr tener cierto control consentido con los chicos. Las herramientas existen y están disponibles para que podamos utilizarlas. Aquí algunas ideas:

• Revisar Centro para Familias en Meta: los padres pueden supervisar la actividad de sus hijos en Instagram y tener una experiencia segura en la plataforma. Además de establecer límites diarios de tiempo en pantalla, podemos configurar que nos lleguen notificaciones cuando los niños publican y tener notificaciones sobre a qué perfiles siguen, al igual que quiénes son sus seguidores. También se puede negativizar términos para que no aparezca contenido sobre esas palabras.
• En TikTok, evitar totalmente la sección “For You”. Establecer una lista de seguidores y que solo puedan ver el contenido de esos amigos. No permitir en ningún caso que puedan ver contenidos en vivo
• WhatsApp: Configurar la Aplicación para que no se descarguen los videos y fotos que reciban